Si estás haciendo unas cortinas y no tienes claro qué sistema de cinta colocar porque eres un novato en esto de la costura, te recomendamos las cintas para cortinas con anillas. Tienen muchas ventajas para los principiantes y además quedan muy bien. Te contamos cuáles son estas ventajas:

  1. La cinta siempre se coloca en la parte superior de la cortina, pegada al borde. No hay que medir ni tener en cuenta si dejar o no tela por encima de la barra. Esto te evitará muchos quebraderos de cabeza. Si además escoges una tela de cortinas que no tenga remate en la parte inferior, podrás colocar la cortina y luego recoger la bastilla sin complicarte la vida.
  2. La cinta para anillas no es necesario fruncirla, aunque hay cintas que lo permiten. Sin embargo, la opción más cómoda es la cinta con enganches para darle a la tela forma de ondas sin tener que realizar frunces. De esta manera, tan solo tienes que colocar la cinta, coserla y ya estará todo listo. Los enganchas para ondas pueden o no utilizarse, por lo que si finalmente no te gusta como quedan y prefieres verlas más sueltas, solo tienes que soltarlos y tendrás unas cortinas tan rectas como desees.

Para un principiante es una gran ventaja, porque no es la primera vez que al fruncir una cinta se rompe uno de los hilos, sobre todo cuando se hace mal, y hay que reponer la cinta desde el inicio.

  1. El sistema de anillas es muy práctico porque no tienes que hacer nada en la tela, solo colocar la cinta. No tendrás que abrir ojales, por ejemplo, que es algo que puede ser complicado cuando la tela es muy delicada y necesita ser rematada para no dañarse. Solo tienes que colocar los ganchos de las anillas en la cinta y tus cortinas estarán perfectamente colgadas. Y, si quieres lavarlas, tampoco tendrás que hacer grandes esfuerzos, solo desenganchas las anillas,  lavas la tela y vuelves a enganchar el sistema. Un par de minutos son suficientes tanto para una cosa como para la otra. Se acabó la pereza a la hora de lavar cortinas.

No olvides que algunas cortinas de ollaos tienen el problema de que los embellecedores no pueden ir a la lavadora directamente, por lo que hay que protegerlos o quitarlos cada vez que se lava, con el riesgo de que la tela se rompa.

por paco