Las tartas de queso son uno de los postres favoritos tras una comida en restaurante o con amigos. Incluso muchas personas hacen estas tartas para poder disfrutar de algo dulce para acompañar al café de la merienda. Y es que su sabor suave y la facilidad para cocinarla, hacen que se haya convertido en algo frecuente en muchos hogares. Esto no quita que muchos la escojan también cuando salen a comer fuera porque es un tipo de tarta que acepta muchas innovaciones y personalizaciones, siendo difícil comer dos que sean exactamente iguales.

La primera de las claves para elaborar una rica tarta de este tipo es elegir bien la crema de queso que se va a utilizar para ello. Muchos prefieren una crema suave, de sabor neutro, para que guste a todo el mundo. Pero otros prefieren mezclar la base suave con otras cremas de sabor más intenso para darle un toque de personalidad. Los amantes de alguna variedad de queso en concreto pueden hacer la tarta con crema de ese tipo en su mayor parte, así, notarán ese toque intenso que tanto les gusta.

La base de la tarta también es importante. Si se trata de una tarta fría la base es fundamental para que no se desmorone al presentarla. Además, el sabor de la misma va a influir en el gusto general. Muchos optan por las típicas galletas María con mantequilla. Es la base clásica y su sabor es muy popular. Pero otros prefieren el toque original de unas galletas tipo Lotus, que le dan ese toque diferente y un poco más actual a la receta de toda la vida. Las galletas favoritas de cada uno encajarán con la tarta muy bien, pero hay que tener cuidado de que si el queso es intenso, el sabor de las galletas sea suave para que no acabe resultando una mezcla demasiado fuerte.

El recubrimiento de la tarta es el último de los trucos que los expertos usan para dar un sabor especial. Hemos hablado de las galletas Lotus y muchos optan por la crema de galleta de esa marca para combinar y hacer más intenso el sabor, llegando a llamarla tarta Lotus. Otros, más clásicos, quieren el dulzor de las mermeladas, de cualquier sabor. Por último, quienes quieren una versión un poco más ligera, apuestan por la gelatina de sabores, que además le aporta ese toque brillante.

por paco